A veces, después de escribir un documento de texto con LibreOffice Writer (en formato odt), cuando quiero revisarlo no me interesa tanto imprimirlo en papel como pasarlo a un dispositivo móvil (tablet o, mejor, un lector de libros electrónicos con pantalla de tinta electrónica). Entonces, para que la experiencia de lectura sea agradable, me interesa que el archivo tenga formato epub (el estándar oficial aunque le pese a los Kindle de Amazon).

He probado varias opciones de conversión, incluido Calibre (también multiplataforma y muy recomendable), pero en mi experiencia la mejor solución ha sido utilizar dos aplicaciones multiplataformas: Writer2ePub y Sigil.

Writer2ePub (W2E) es una extensión para LibreOffice que permite crear fácilmente un archivo ePub desde un archivo de LibreOffice Writer ¡justo lo que buscaba!. Para instalarlo, descargamos la última versión desde la web oficial (a fecha de esta entrada la versión 1.1.28), abrimos Writer de LibreOffice y lo instalamos desde Herramientas – Gestor de extensiones. Después es posible que tengamos que cerrar y abrir LibreOffice para que los cambios sean visibles.

Al abrir nuevamente un archivo de LibreOffice Writer veremos que tenemos tres nuevos iconos en la barra de herramientas. Antes de ejecutarlo con el primer icono, es interesante abrir las opciones de Metadata con el segundo icono. Desde allí podemos configurar algunos ajustes importantes, como título, autor, etiquetas, imagen de portada y otras preferencias del documento, como la posibilidad de añadir un índice o insertar saltos de página después de cada encabezado. Una vez hechos estos ajustes, lo ejecutamos y rápidamente nos crea un archivo epub.

Si bien cuando termina el proceso de creación, Writer2ePub informa del resultado (si ha habido errores o no), según mi experiencia a veces pasa por alto algunos errores (por ejemplo, con frecuencia se lía en las listas de elementos si hay unas anidadas dentro de otras). Para comprobarlo uso Sigil, otra aplicación libre, gratuita y multiplataforma (Linux -en los repositorios-, Windows y Mac) para la edición y gestión de libros electrónicos.

Concretamente, Sigil dispone de una herramienta (en Herramientas – Comprobar EPUB) que nos facilita la tarea y, en caso de existir, nos localiza el error. También nos ofrece una corrección automática de los errores pero según mi experiencia es mejor hacer las correcciones manualmente. Para ello hay que activar la vista de código, por lo que es necesario tener unos mínimos conocimientos de HTML.

Aparte de la comprobación y corrección de errores, Sigil nos permite seguir editando el texto y sus metadatos y otras opciones como añadir una imagen de portada si no lo hemos hecho antes.

Después de eso, ya puedo leer mis documentos con mi eReader y desde mi tablet con Aldiko. ¡Buena lectura!